jueves, 18 de junio de 2015

Y nadie las arrebatará de mi mano...



por: Diego Armando

Juan 10:27-30 "Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen; 28y yo les doy vida eterna y no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano. 29Mi Padre que me las dio, mayor que todos es y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.

Viviendo pensando que la salvación se pierde es no vivir en paz, es no haber encontrado reposo en Jesucristo y tratar de valerse por obras propias de uno mismo. 


Algo que dejaremos claro antes de seguir, es que tampoco por pensar que la salvación se pierde se dirige la persona al infierno. 

Ha de ser terrible vivir pensando que en cualquier momento por causa de un descuido humano (pecado), esa persona sea condenada al infierno. Sería una salvación por obras, queriendo decir que por portarnos bien, solo por portarnos bien, iremos al cielo: "si me porto bien entonces me haré merecedor de ese 'regalo' que Dios da, llamado; salvación. Si la salvación la podemos perder por pecar, entonces la obtendríamos por nuestras buenas obras, lo cual para nada es así. 

Los 12 apóstoles (a excepción del hijo de perdición), fueron salvos y seguían pecando. 1 Juan 1:6,10 6.Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad; 10.Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros. Tomás era incrédulo, Pedro negó a Jesús tres veces, Juan y Jacobo tenían un carácter explosivo, incluso hasta eran llamados "hijos del trueno", de los once que quedaron, diez ya habían abandonado a Jesús mientras sufría martirio, solo Juan le seguía de cerca. Pablo antes de convertirse era asesino de cristianos, y aun convertido tuvo una acalorada discusión con Bernabé. Los antes mencionados estaban en constante crecimiento. No estamos justificando sus pecados, sino antes estamos diciendo que nadie es perfecto, no existe cristianismo perfecto, no existe cristianismo sin pecado.  No existe cristianismo sin pecado pero si un anhelo en el cristiano de crecer en santidad y vencer los pecados que aún se manifiestan en su vida. No para ser perfectos pero si buscando agradar a Dios.

La Palabra de Dios dice: Romanos 8:16 "Porque el mismo Espíritu da testimonio a nuestro espíritu «que somos hijos de Dios»" y también dice esto: 1 Juan 5:13  "Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna". Son palabras que solo un corazón que ha sido regenerado puede entender en su totalidad. Dios mismo lo ha prometido, el no puede mentir, tal como se lo prometió a Pedro Lucas 22: 31-32 31Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí que Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; 32mas yo he rogado por ti que tu fe no falte. Así también nos dice a nosotros; Mi siervo eres tú; yo te he escogido y no te he rechazado: No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia. (Isaías 41:10)

La salvación no es una obra del hombre para Dios, sino una obra de Dios para el hombre... "la salvación es del SEÑOR, y Él es el Único Salvador":  Isaías 43:11 Yo, yo soy el SEÑOR, y fuera de mí no hay salvador, Salmo 3:8 La salvación es del SEÑOR, Salmos 37:39 Mas la salvación de los justos viene del SEÑOR, Jeremías 3:23 ciertamente, en el SEÑOR nuestro Dios está la salvación de Israel, Jonás 2:9 Lo que prometí, pagaré. La salvación es del SEÑOR. 

Si la salvación es del Señor, ¿crees que haya alguien que le pueda arrebatar esa salvación de sus manos? Romanos 8:35,38,39 35¿Quién nos apartará de la caridad del Cristo? ¿tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o cuchillo? 38Por lo cual estoy cierto que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, 39ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna criatura nos podrá apartar de la caridad de Dios, que es en el Ungido, Jesús, Señor nuestro. Nadie, nadie nos podrá separar jamás de Su maravilloso amor, nadie y nunca de los nunca. 

Algo muy importante, no debemos confundir la frase "seguridad de salvación" con pecar a lo gusto y deleitarse en pecar y aun así ser salvo, aparte que ni son lo mismo ni significan lo mismo, debe haber ese deseo de santidad en el creyente, sin lugar a dudas que sí. Hebreos 12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. No viviendo en santidad como una obra para ser salvo, sino por que ya se es salvo. Una persona al momento de ser salva, de haber sido regenerada, ahí mismo le fue dado el deseo de buscar a Dios de todo su corazón y de vivir en santidad por el resto de su vida. Por lo tanto está capacitado para odiar el pecado e implorar ayuda el día de la tentación, y así mismo ser librado de tentación. 

Jesucristo mismo lo ha prometido, no permitirá que satanás, el diablo, nos arrebate de Sus santas manos. Juan 10:27-30 27"Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen; 28y yo les doy vida eterna y no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano. 29Mi Padre que me las dio, mayor que todos es y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. 30Yo y el Padre una cosa somos".  Ningún padre permitiría que le arrebaten a sus hijos de sus manos, antes prefiere que le quiten la vida y Jesucristo Nuestro Padre ha dado ya su vida por nosotros al morir en la cruz. 

Si hay una persona que ha estado leyendo esto y cree que la salvación se pierde le tengo unas preguntas: ¿Has nacido de nuevo, hay pruebas en tu vida que efectivamente muestran una nueva criatura en Cristo? ¿Crees que eres salvo? — Si has respondido que si, que bueno, no pretendo ni es mi propósito hacerte dudar, sino que medites y refuerces esa fe en Cristo, no en ti. ¿Está tu salvación en manos del Señor Todopoderoso o está en tus manos?

Supongamos que la semana pasada cometiste un pecado el cual te hizo dudar y pensar que perdiste tu salvación, entonces ese arrepentimiento te hizo acercarte a los pies de Jesucristo, arrodillado y humillado sinceramente arrepentido y le pediste perdón, y efectivamente Él te perdonó, ¿Recuperaste tu salvación? 


Supongamos que hoy te sucedió lo mismo, volviste a pecar, así que te volviste a humillar... ¿la volviste a recuperar?

Supongamos que, si Dios permite, dentro de un mes te sucede lo mismo, pecas, pierdes tu salvación, y te vuelves arrodillar ¿la vuelves a recuperar?.... y así durante toda tu vida es una salvación no segura, ¿Acaso nacerás de nuevo varías veces en tu vida? 


No hermano, lo que se pierde es el gozo de la salvación, pero no la salvación. El rey David pecó y el dijó; Salmo 51:12 "Restitúyeme el gozo de tu salvación, y sostenme con un espíritu de poder". Lo que nosotros debemos guardar no es nuestra salvación, lo que debemos esforzarnos por guardar es nuestra santidad, nuestro testimonio. 

Efesios 2:8 "Porque por gracia sois salvos por la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios".


1 comentario:

  1. Excelente! Gracias por compartir, yo mucho tiempo creí que la salvación se perdía pues eso me enseñaron, pero es una vida de inseguridad, cuando yo misma vine a la palabra, comprendí que no dependía de mi o de mi esfuerzo, sino de lo que Cristo ya había hecho por mí, además comprendí que su obra de redención fue perfecta y completa, no le faltaba mi ayuda, Bendiciones!

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