Lecciones practicas para entender la palabra de Dios
En este mensaje, Charles Stanley explica lo que es la tentación y cómo funciona. El enemigo se esfuerza para incitarnos a dejarnos llevar por nuestros deseos, más allá de los límites fijados por Dios; por invitarnos a desobedecer a Dios; y para que nos rebelemos contra Él y hagamos nuestra voluntad.Descargar en mp3
Charles Stanley - Cómo confrontar sabiamente la tentación
Notas del Sermón
INTRODUCCIÓN
DESARROLLO DEL SERMÓN
Los seres humanos hemos confrontado la tentación
desde los tiempos de Adán y Eva.
Inclusive Jesús fue tentado mientras anduvo en este
mundo, pero solo Él pudo resistir las tentaciones en todo momento. Aunque
ninguno de nosotros puede pretender hacer lo mismo, Dios no nos deja solos para
enfrentar los ataques del diablo. Nos ayuda a mantenernos firmes, al darnos el
poderoso versículo bíblico que hallamos en 1 Corintios 10.13: “No os ha
sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os
dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente
con la tentación la salida, para que podáis soportar”. Si deseamos responder
sabiamente ante la tentación, debemos añadir esta porción bíblica a nuestra
armadura de protección.
La tentación puede
ser definida como una invitación a ir más allá de los límites
que Dios ha trazado para nuestra
vida.
Por ejemplo, amar a otra persona
es algo bueno,
pero la lujuria es un sentimiento egoísta que va más allá de los límites que el Señor ha establecido para
nosotros. La tentación es básicamente una invitación a desobedecer a
Dios y a rebelarnos a su voluntad, para así hacer la nuestra.
Es Satanás quien nos tienta
y quien hace uso de
otras personas
para alejarnos
de la voluntad de Dios. Sin
embargo, no podemos declarar que Satanás nos ha hecho pecar, pues somos nosotros
los que nos rendimos ante la tentación.
La naturaleza de la tentación
- Es común para todos. Aunque no todos somos vulnerables en las mismas áreas, nadie está exento de ser tentado.
- Se forma de la fantasía y de aquello que vemos. Comienza como un pensamiento y progresa cuan- do nos imaginamos participando en aquello que no es del agrado de Dios.
- Es diferente a las pruebas. El diablo nos tienta para hacer lo que es malo y que así nos alejemos de Dios. Las pruebas son usadas por el Señor para fortalecernos.
Ideas falsas acerca de la tentación
Sabemos que cada área de cautividad
puede traer consecuencias adicionales.
- La tentación no es pecado. La vida de Jesús nos lo demuestra. Aunque fue tentado, nunca llegó a pecar (Mt 4.1-8). No siempre tenemos control sobre los pensamientos que llegan a nuestra mente, pero podemos escoger entre dejarlos ir o retenerlos.
- No somos empujados hacia la tentación. El ene- migo no nos empuja hacia su trampa, ni tampoco caemos en ella de manera accidental. Aunque somos incitados por el diablo, o influenciados por otras personas, la decisión de salirnos de la volun- tad de Dios es solo nuestra.
- El Señor no se ofende cuando somos tentados. Sabe que las tentaciones llegarán a nuestra vida y desea que las usemos como advertencias que nos indican el camino por el cual ir.
- No siempre podemos huir de ellas. En ocasiones, huir de la tentación es la mejor opción, pero a veces esto es imposible de lograr. Por eso debemos edificar nuestras defensas para no ceder ante las tentaciones.
El proceso
de la tentación
Debemos entender la manera en que funciona la ten- tación para así poder defendernos de ella.
- Pensamientos. Todo comienza con un pensamien- to tentador que
entra en nuestra mente.
- Imaginación. Nos imaginamos lo que sentiremos al realizar lo que deseamos. Aunque no hemos actuado, lo vivimos en nuestra mente.
- Meditación. Una vez que hemos descubierto pla- cer en cuanto a ese asunto, pensaremos en ello más frecuentemente.
- Voluntad. Mientras consideramos si debemos o no continuar con ese pensamiento, nuestra voluntad se ve envuelta.
- Decisión. Eventualmente tendremos que tomar la decisión de continuar por el camino peligroso o de alejarnos de él.
- Consentimiento. Es en ese punto que nos rendi- mos ante la tentación.
- Pecado. Desobedecemos al Señor.
El poder de la tentación
sexual
La tentación
sexual es tan poderosa,
porque es un ofrecimiento
engañoso de placer inmediato
sin con- secuencias. Si no lo rechazamos desde el comienzo, seguirá creciendo hasta llegar a ser un gran pro- blema. Esta tentación
comienza como una pequeña chispa, pero pronto llega a ser una poderosa llama,
hasta que se convierte en un infierno
en erupción. Una vez que nos hemos rendido ante el deseo,
nos hemos debilitado para la próxima tentación.
Cómo proteger
las áreas vulnerables
Un aspecto importante en relación
con este tema es el saber reconocer y proteger
nuestros
puntos débiles. Lo primero
que debemos hacer es decidir aquello que no tendrá parte en nuestra vida.
Luego debemos descansar en la promesa que Dios nos ha hecho de poner límites
a las tentaciones (1 Co
10.13). Y final- mente, tenemos que
tomar en cuenta las consecuencias de nuestra desobediencia.
Cómo proteger
las áreas vulnerables
Hay ciertos pasos
que debemos dar para confrontar sabiamente la tentación:
- Seamos responsables. Somos responsables por lo que hacemos con las tentaciones.
- Pongamos nuestra mirada en lo que es impor- tante. La tentación nos invita a mirar solo lo que tenemos delante, pero Dios desea que veamos las consecuencias que podríamos sufrir.
- Identifiquemos nuestros puntos débiles. Reconozcamos esas áreas vulnerables que podrían llegar a ser blancos fáciles para Satanás.
- Visualicémonos haciendo lo que es correcto. En vez de fantasear con el pecado, imaginémonos haciendo lo que es del agrado de Dios.
- Seamos responsables ante otros. Busque a un amigo en el que confía, y contáctelo cuando se sienta tentado.
- Lea la Palabra de Dios. No podrá defenderse ante los ataques del enemigo si no conoce las Sagradas Escrituras.
- Haga de la oración una parte vital de su vida. Es al conversar con el Señor cada mañana que somos fortalecidos y preparados para enfrentar los ata- ques diarios de Satanás.
REFLEXIÓN
n ¿Cuál es la tentación más
poderosa que
hoy enfrenta? ¿De qué manera
la ha confrontado?
n ¿Cuáles son las áreas más vulnerables de su vida?
¿Qué hará para defenderse cuando sea tentado?
n Si
considera las tentaciones que más frecuente- mente enfrenta, ¿qué debe hacer
de antemano para ser fortalecido y poder resistirlas?
No hay comentarios:
Publicar un comentario