martes, 7 de julio de 2015

Nosotros no aportamos ni medio de grano de arena a la salvación


por: Raul Antonio Lara Arias

Nosotros no aportamos ni medio grano arena a la salvación, eso sería tener parte con la gloria que solo a Dios le pertenece.

Déjenme decirles según la palabra de Dios, que:


El hombre natural no busca, ni tiene interés por los caminos de Dios.
Romanos 3:10-18
Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; No hay quien entienda. NO HAY QUIEN BUSQUE A DIOS. Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; No hay quien haga lo bueno, NO HAY NI SIQUIERA Y. Sepulcro abierto es su garganta; Con su lengua engañan.Veneno de áspides hay debajo de sus labios; Su boca está llena de maldición y de amargura. Sus pies se apresuran para derramar sangre; Quebranto y desventura hay en sus caminos; Y no conocieron camino de paz. No hay temor de Dios delante de sus ojos.

Que los que creemos en el Evangelio de Jesucristo es:
Primero, porque Dios ya nos ha predestinados para creer en él PARA ALABANZA DE SU GLORIA, que solo a Él le pertenece.
Efesios 1:11-13
En él asimismo TUVIMOS HERENCIA, HABIENDO SIDO PREDESTINADOS conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad, a fin de que seamos para alabanza de Su gloria, nosotros los que primeramente esperábamos en Cristo. En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,

También porque somos escogidos y elegidos por Dios.
Efesios 1:3-5
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad,

1 Pedro 1:2
ELEGIDOS según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.

Segundo, porque Dios el padre es el que nos enseña y nos trae a su Hijo Jesucristo para que el Hijo nos resucite y nos lleve a Él.
Juan 6:44-45
Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero. Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados por Dios. Así que, todo aquel que oyó al Padre, y aprendió de él, viene a mí. «(Vamos a Él, por que Él mismo nos ha atraído hacia Él mismo».
Juan, 6:65
Y dijo: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del Padre.
Juan 14:6
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

También porque Jesucristo nos revela al Padre.
Mateo 11:27
Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar.

Y tercero, porque no nacemos de nuevo y somos hijos suyos por nuestra voluntad, sino por la de Dios.
Juan 1:12-13
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.

Gracia y paz de Dios y del Señor Jesucristo.

Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere


No hay comentarios:

Publicar un comentario