La Biblia dice que Él es el Rey de los Judíos...
Él es el Rey de Israel.
Él es el Rey de Justicia.
Él es el Rey de los tiempos.
Él es el Rey de los cielos.
Él es el Rey de gloria.
Él es el Rey de reyes.
Y el Señor de señores.
Y el Señor de señores.
Ese es mi Rey.
Me pregunto ¿Lo conoces?
Mi Rey, es un Rey Soberano.
Ningún tipo de medida puede definir Su amor ilimitado.
Él es perdurablemente fuerte.
Él es enteramente sincero.
Él es enteramente firme.
Él está inmortalmente lleno de gracia.
Él es imperialmente poderoso.
Él es imparcialmente misericordioso.
¿Lo conoces?.
Él es el mayor fenómeno que jamás.
ha atravesado el horizonte de este mundo.
Él es el Hijo de Dios.
Él es el Salvador de los pecadores.
Él es la pieza central de la civilización.
Él es el incomparable.
Él es sin precedentes.
Él es la idea más elevada en la literatura.
Él es la mayor personalidad de la filosofía.
Él es la doctrina fundamental de la verdadera teología.
Él es el único cualificado para ser el suficiente salvador.
Me pregunto si lo conoces hoy.
Está dispuesto para el tentado y el cansado.
Él simpatiza y Él salva.
Él fortalece y sostiene.
Él cuida, y Él guía.
Él sana al enfermo.
Él limpió a los leprosos.
Él perdona a los pecadores.
Él libra a los deudores.
Él libera a los cautivos.
Él defiende a los débiles.
Él bendice a los jóvenes.
Él sirve a los desafortunados.
Él cuida a los ancianos.
Él recompensa a los diligentes.
Él embellece a los mansos.
Me pregunto si lo conoces.
Él es la llave del conocimiento.
Él es la fuente de la sabiduría.
Él es la entrada a la libertad.
Él es el camino hacia la paz.
Él es el camino de justicia.
Él es la autopista hacia la santidad.
Él es la puerta de la gloria.
¿Lo conoces?
Su vida es inigualable.
Su bondad es ilimitada.
Su misericordia es eterna.
Su amor nunca cambia.
Su palabra es suficiente.
Su gracia es suficiente.
Su reino es justo.
Y Su yugo es fácil.
Y Su carga es ligera.
Me gustaría poder describírtelo.
Él es indescriptible.
Él es incontenible.
Él es invencible.
Él es irresistible.
No lo puedes quitar de tu mente
No lo puedes soltar de Su mano.
No puedes sobrevivir a Él.
Y no puedes vivir sin Él.
Los fariseos no podían soportarlo.
Pero se encontraron con que no podían pararlo.
Pilato no pudo encontrar ningún fallo en Él.
Herodes no pudo matarlo.
La muerte no puedo controlarlo.
Y la tumba no puedo retenerlo.
¡Ese es mi Rey!
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